El motivo no era otro que tras meses de finalizar la edición Cadenas de Libertad, realmente pensé que aquel final que titulé ''El último atardecer'' era perfecto para lo que quise transmitir a lo largo de aquellos dos años, y eso me hacía dudar sobre cuál debía ser el siguiente paso.
Si Cadenas de Libertad simbolizaba la búsqueda del valor ante temas que otrora me aterraron, ¿qué podía perseguir una vez que lo había logrado? ¿Cuál debía ser el siguiente paso?
Disfrutar.
Así de simple. Lo supe además de una forma mágica.
Estando de viaje por Escocia (la tierra más bonita que he visto, por cierto) y tras días de visitar praderas sacadas de los libros de Tolkien, montañas de picos nevados que se perdían entre las nubes y castillos con siglos de historia que contar, finalmente llegamos al que considero el Fin del Mundo. Skye... nunca olvidaré ese lugar.
Pues fue allí, como un hechizo invocado a mi mente de forma involuntaria, frente a los gigantescos acantilados y un mar con nubes arremolinadas sobre nosotros que dejaban caer una tenue lluvia lo supe: El nuevo capítulo de Reino de Vii sería una tormenta de sueños por cumplir.
Consideré que si me encontraba allí, en uno de los países que más quise visitar y rodeado de una compañía inmejorable, todo podía ser posible. Aquella tarde me sentí en la cima del mundo. Nada me faltaba.
Fue entonces cuando, del mismo modo que Cadenas de Libertad comenzó dos años atrás al filo de un acantilado hecho de miedos en donde no me atreví a saltar y ser libre, Tormenta de Sueños debía comenzar por aquel nuevo y gélido acantilado cargado de ilusiones. Un salto que esta vez me veía capaz de realizar.
Y para aquellos que lo leyeron en su momento, el comienzo de la quinta etapa del blog supuso un cambio brusco de mentalidad y estilo. Mezclé recuerdos reales con toques fantasiosos de fragmentos que caracterizan mis gustos y personalidad. Añadí varias fotos que hicimos a lo largo de aquel viaje y del mismo lugar donde tuve la idea original. Pero sobre todo mis palabras desprendían un positivismo totalmente contrario a los orígenes del blog allá por 2011.
Tormenta de Sueños es el gran proyecto que a día de hoy sigue su andadura. Esta primera entrada tuvo gran acogida, tanto que sigue siendo la número uno en cuanto a visitas de esta quinta edición, por lo que me alegré muchísimo de ver que, a pesar de varios meses sin contenido, mis lectores regresaron al Reino ansiosos de conocer la nueva aventura.
El hilo conductor nos ha llevado desde las gélidas montañas y llanuras de Escocia hasta atrás en el tiempo, incluso visitando el Renacimiento italiano por Florencia e incluso Venecia, ciudad de mis sueños. Y puedo asegurar que queda mucho camino por delante, y distintas localizaciones por visitar, porque considero que esta quinta edición cerrará su ciclo recordando algo sencillo; ser feliz con lo que logras vivir.
Agradecer lo que tienes, pero también lo que eres. Valorar a todos los que se preocupan por ti o por tus propios deseos, hacer lo imposible por estar a la altura de los que van a muerte contigo, y sobre todo; mirar al futuro con decisión, pero sin perder de vista los regalos del presente.
Así sigo un año después. Habiendo cumplido muchos de los sueños que tenía abandonados en un cajón, dándoles forma y pensando en cuál será el próximo relámpago que deba perseguir. Pues una tormenta no tiene por qué ser oscura, y la lluvia, si quieres, puede ser el alimento del alma.
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Tormenta de Sueños:
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