viernes, 27 de septiembre de 2013

Invencible


Difícil. Es la única palabra que se me ocurre al recoger mis cosas. 
Mientras guardo los objetos de mis estanterías, en la misma maleta que venía cargada de buenos propósitos el año pasado, pasan por mi mente cientos de momentos que he vivido a lo largo de estos meses en estas cuatro paredes.
Esta pequeña habitación es mucho más grande en mi mente. Han ocurrido tantas cosas...
Risas hasta las tantas de la madrugada, llantos que nadie podía consolar, e incluso enfados con los que no contaba. Pero sin duda, lo que más recuerdo, son todos esos momentos que jamás olvidaré durante este año diferente.

Mi primer piso de estudiantes... Dios... cómo lo voy a echar de menos.



Recuerdo cuando llegué aquí por primera vez, era todo tan frío, tan hostil. No podía evitar sentirme inseguro; estaba en una ciudad, solo, sin conocer siquiera a mis compañeros de piso. Con el tiempo nos fuimos haciendo amigos. Cada uno con sus cosas, sí, pero únicos a su manera.
Acaricio la cama donde dormí tantas noches con ardientes deseos de volver a pasar otro año aquí, algo que hasta nadie sabe cuándo volverá a ocurrir. Me gustaba ver cómo a pesar de ser la habitación más pequeña, era donde todos venían a charlar, a hacerme compañía. Mi cuarto era el lugar de reunión de este pequeño piso por alguna razón que aún hoy desconozco.

Segundos antes de cerrar mi maleta, sentí una presencia observándome. Una presencia que me resultaba familiar...

-Parece ser que se acabó-dijo.

No veía a nadie, pero aquella voz... sin duda sabía de quién se trataba. Era el mismo ser que al llegar aquí un año atrás, me habló susurrando en el crepúsculo. Un viejo amigo inexistente al que no esperaba volver a ver jamás.

-Supongo que nada dura para siempre-contesté.

-Cierto, el cambio es algo que no puede evitarse.

Metí la mano en mi bolsillo, y de él saqué una vieja moneda que portaba desde mucho tiempo atrás.

-Veo que sigues portándola contigo.

Sin contestar, quedé embelesado, observando la moneda y el paso del tiempo que se posaba sobre ella, mientras aquella voz continuaba hablando.

-Una vez te pregunté qué te atormentaba... ahora te digo, ¿qué has aprendido?.

La primera noche que pasé en este piso, en esta habitación... era un recuerdo que tuve muy presente cada día que pasaba, pues las palabras de aquel fantasma me marcaron para siempre. En cierto modo, seguía guardando un gran respeto a ese ser invisible que me vigilaba. Finalmente, llegada la hora de mi despedida final, puse las cartas sobre la mesa.

-Es el momento de decir adiós. Pero esta vez, no voy a despedirme de mí mismo. No voy a huir de lo que soy, ni aparentaré ser una persona fría e impasible a la que nada le afecta. Eso solo me ha traido problemas... problemas que tuve que soportar y superar en soledad. No... todo eso se acabó.

Voy a tirar a la basura toda apariencia oscura y mis deseos de no ser conocido por nadie. Voy a desechar proyectos de futuro que me hubiera gustado tener, y voy a enfrentarme a todo lo que aún desconozco. Voy a ponerme cara a cara con el destino, aceptando sus desafios, sabiendo que voy a caer mil veces más. Caer una y otra vez, significa que continúas luchando. Una guerra sin final que me pondrá a prueba mil veces más fuerte de como lo ha hecho hasta ahora.

Perder y fracasar no es lo mismo. El fracaso puede remediarse con una segunda oportunida, la pérdida es eterna. Este año he fracasado muchas veces, pero aún no he perdido hasta hoy. Se podría decir, que soy un fracasador sin miedo a reconocerlo.

Un fracasador que lucha por sus sueños. Unos sueños que no llegan a cumplirse, pero que siguen estando ahí, inertes, pero presentes.
Es posible que esa mala suerte que se ha cebado conmigo durante estos años siga conmigo, recordándome que mis fracasos, tanto académicos como sentimentales no hagan más que crecer, pero puede que algunos estemos destinados a no cumplir nuestros objetivos para que otros puedan lograrlo por nosotros. Pero lo que es más importante:

Fracasar no es lo mismo que ser vencido.

Llegué aquí creyendo que olvidar quien era sería la mejor solución, cuando debía hacer exactamente todo lo contrario; aferrarme a mi alma, no cambiarla, sino mejorarla a base de equivocaciones. ¿He fallado en mi propósito?, por supuesto, pero, ¿acaso no me vine completamente solo a esta ciudad?, ¿no llegué a esta casa sin saber ni siquiera qué personas encontraría?, ¿acaso no he sido lo suficientemente fuerte como para arriesgarlo todo por algo que desconocía completamente?.

Gracias a este año, he aprendido a ser valiente, a tener el coraje para forjar una armadura de valor. Puede que haya fracasado en el propósito por el que vine, pero he ganado en cientos de batallas con las que no contaba.

¿Quién me hubiera dicho a mí, que la gente me daría las gracias por ayudarlas con mis palabras?. Gente que se acercaba con lágrimas en los ojos, diciéndome que han aprendido mucho de mí en este año, que me he convertido sin saberlo en un referente de sabiduría y fuerza para otros...

Creo que ya sé lo que he aprendido este año. He aprendido a no rendirme, a levantarme incluso antes de caer, sin ceder a la cruel realidad.

Sujetando con fuerza la moneda, la lancé hacia arriba, y mientras flotaba en el aire, la recogí, guardándola sin mirar qué cara había salido.

-He aprendido a no rendirme nunca... he aprendido, a ser invencible...

Tras mis palabras, aquella voz incorpórea dijo las que serían sus últimas palabras con tono de satisfacción antes de desaparecer:

-Ahora eres tú. Ahora eres de verdad. Mi trabajo aquí ha terminado.

Una parte del alma de una persona se queda a vivir en cada lugar en el que estamos, y hoy, yo he perdido parte de la mía. Las mejores historias empiezan y acaban de igual forma. Es el momento de terminar una aventura que comencé hace tiempo. Después de un silencio que no volvió a interrumpirse, recogí mi maleta del suelo, me dirigí hacia la puerta de la que fue mi habitación durante un año, eché un último vistazo atrás, y cerré la puerta para no volver a abrirla nunca más.




El tiempo dirá lo que está por venir, hasta entonces, no me queda nada por decir...


                     FIN






 -Vii Broken Crown-

``Solo puedo dar las gracias por un año convertido en eternidad en mi memoria. ``Los Jueves siempre seguirán siendo épicos´´.

``Seguiremos luchando, nadie nos podrá parar, nuestra voz ahora es la vuestra, ahora somos de verdad´´ -H2Oz, Mägo de Oz-


6 comentarios:

  1. Me da lástima que el Reino de Vii cierre temporada ya, espero con ansias la cuarta. Ha sido un buen año leyéndote y aprendiendo cosas contigo y sobre ti. Por ejemplo; he aprendido el valor que tiene lo que me regalaste por mi cumpleaños. Algo tan simple como puede ser una carta, para ti no lo es, para ti es algo muy importante, es un trozo del alma de la persona que la escribe y con la cual se debe tener un especial cuidado ya que estas tocando el corazón del destinatario. Soy consciente de lo importante que es para ti, asi que he de decirte que estoy encantado de haber recibido dicho regalo. También soy consciente de lo que supone Mägo de Oz para ti, que eres el fan más grande de ellos que he conocido y que me hace feliz haber compartido aquel brindis con ellos a tu lado. Como tú dijiste: “gracias por hacer realidad mis sueños y dejarme formar parte de los tuyos” pues sin tu brillante idea, ahora no podríamos presumir de haber brindado con los mismísimos Mägo de Oz. Una de las entradas que mas afectado me dejo es “Besos de Mariposa” donde pude descubrir que tu también has perdido a una persona importante en tu vida. También es casualidad que compartas la misma línea sanguínea que yo con la persona que yo perdí, una abuela. Y toca las narices que por culpa de esa desdichada perdida no podamos escuchar una canción tan preciosa como es “Desde mi cielo”. Y lo más curioso, es que gracias a tu blog pude aprender lo que era una “amarilla” y saber reconocer quien era la mía. Creo que es algo que está más que claro. En fin, Gracias por dejarme conocerte a través de este blog, pero más gracias aun, por dejarme conocerte en persona. Sin duda, algo que no olvidaré del 2013, son los ratos contigo, pero recuerda que no ha acabado aun el año, tenemos pendiente ir a Huercal-Overa, a Madrid y como no, la Nöche de Oz. En resumen; Vicen, gracias por ser quien eres, pero mas gracias aun por dejarme ser tu amigo y por ser tu el mió.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El que ha aprendido muchas cosas de ti he sido yo. El paso del tiempo nos ha convertido de ser dos conocidos, a ser verdaderos amigos. Nos veíamos cada un mes o dos y charlabamos sobre música. El cambio ha sido tal, que ahora ambos lideramos nuestro propio grupo de rock.
      Sin duda debía ponerte en la dedicatoria. Puede que no estuvieras en ese piso como los demás, pero has pasado casi tanto tiempo en él como nosotros. Pero más que por eso, te he puesto porque en todos los buenos recuerdos que tendré de aquel año en la ciudad, estabas tú.

      Una vez más te doy gracias por haber estado ahí todo este tiempo, y me alegro de que me hayas acompañado en este blog hasta el final.

      Eliminar
  2. Deberías estar trabajando en editoriales, escribes a la perfección. Eres una persona muuuuuy grande y que siempre que has conseguido algo ha sido por ti mismo, luchando, como siempre haces, eres una persona muy especial para mi, y al leer lo que escribes me enorgullece ver donde has llegado y todo lo que te ganas con esfuerzo. Simplemente eres un ejemplo a seguir tanto como persona como escritor, porque leyendo tales cosas se aprende mucho, se aprenden cosas muy importantes... Espero seguir viéndote siempre como mejoras y cosigues lo que quieres como lo llevo haciendo desde hace muuuuuuuuuucho tiempo... Eres el mejor, por lo menos para mi, Simplemente, GRANDE. Gracias por enseñarme tantísimas cosas, que me hicieron mas fuerte... Para mi no eres un amigo, eres un hermano y siempre lo serás... Te quiere tu amigo, admirador, hermano, confidente.

    Sergio Mota.

    Sigue creciendo, hermano.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Bueno, en editoriales quien sabe, por ahora algunas de mis poesías ya forman parte de la historia de Águilas al estar publicadas en su libro :)
      A ti no se que decirte, son muchos años los que estamos juntos y mas que amigos somos hermanos de sangre. Me alegro de que te guste como escribo y espero que dentro de poco puedas tener mi primer libro en tus manos.
      Un abrazo.

      Eliminar
  3. Buenas. No me conoces, pero conozco tu blog gracias al Twitter. Me encanta como escribes, y haces que me emocione con cada entrada nueva. Con esta incluso he llorado. Y sí, deberías de estar trabajando en editoriales y hacer un libro.
    Sigue así, eres grande. :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me alegra saber que mis pequeñas reflexiones te gusten, e incluso, te emocionen. De todo corazón espero que hayas disfrutado con cada publicación, y por supuesto, millones de gracias por tu atención :)

      Eliminar